Desde que el mundo es mundo los hombres hemos tenido una obsesión: el tamaño del pene. Cuando las mujeres nos dicen que el tamaño no importa, no las creemos. En muchos casos, nos resignamos con lo que la Naturaleza nos ha dado. En algunos, sin embargo, nos rebelamos contra el dedo del destino y buscamos la forma de tener un miembro miril más grande. Para conseguirlo, recurrimos a la ayuda del desarrollador, extensor o alargador de pene. De este dispositivo os vamos a hablar a continuación.

El alargador o extensor de pene, como su propio nombre indica, es un dispositivo que se usa con el fin de alargar el tamaño del miembro viril. También se utiliza con fines médicos para corregir lo que se conoce como enfermedad de Peyronie o curvatura peneana. Con un aparato de este tipo se intenta rectificar la curvatura del falo que caracteriza a esta enfermedad.

¿Cómo es un alargador de pene?

En el mercado podemos encontrar alargadores de pene de diferentes tipos. Son varias las firmas que comercializan extensores pero todos ellos funcionan de un modo similiar y constan de las mismas partes básicas.

Un desarrollador de pene es un dispositivo que se coloca anclado en la base del falo y hasta el surco subcoronal. La tracción que se ejerce sobre el miembro viril hace que éste se mantenga estirado, recto y extendido.

Las tres partes básicas de las que constan los extensores de pene son las siguientes:

  • Base de anclaje: ésta se coloca en la base del falo.
  • Anclaje distal: éste se coloca en el surco subcoronal, es decir, justo debajo del glande.
  • Varillas de tracción: éstas unen los dos anclajes. Con ellas se regula la distancia entre ambos anclajes.

Las varillas de tracción son las responsables de mantener el miembro bajo el efecto de la tracción. Son, en definitiva, las que se encargan de alargar el pene.

¿Cómo se usa un desarrollador, extensor o alargador de pene?

Quien vaya a utilizar un agrandador peneano debe tener en cuenta una serie de recomendaciones:

  • Los desarrolladores deben ser empleados siempre cuando el miembro se encuentra flácido, no cuando está erecto.
  • La distancia entre los dispositivos de anclaje debe regularse con el objetivo de mantener el falo recto, estirado y sometido a una tracción moderada. En ningún caso el dispositivo debe provocar molestia ni dolor.
  • Para que haga su efecto, el alargador debe emplearse durante un mínimo de 2 horas al día, mejor si son seguidas, y 6 días por semana.
  • Es mejor no usar el dispositivo durante las horas de sueño. Los cambios de posición involuntarios y las erecciones nocturnas podrían causar lesiones.

Finalmente, hay que tener presente que este aparato no es un aparato milagroso. Para obtener resultados hay que ser constante. Si se desea alargar el tamaño del falo hay que usar el extensor durante varios meses.

Hay estudios que apuntan a que un uso constante durante 12 semanas bastan para ganar longitud. También los hay basados en comprobar la relación entre alargamiento y grosor. Según dichos estudios, el miembro se hace más largo sin prejuicio para el grosor, que se sigue manteniendo. Las mismas investigaciones apuntan a que, una vez dejado de usar el desarrollador, no se pierde la longitud ganada.

¿Qué puede esperarse de un dispositivo de estas características? Un crecimiento de entre 1 y 2 centímetros en total. Es decir: que alguien que tenga un miembro que mida alrededor de 14 o 15 cm no puede esperar que, a fuerza de tesón, ese falo llegue a alcanzar la medida del de alguien como Nacho Vidal.

Las bombas de vacío para hombres

Muchas personas otorgan a las bombas de vacío para hombres la categoría de aparato alargador. No siendo exactamente así, vamos a detenernos a analizar qué son y para qué sirve una bomba de vacío peneana.

Un dispositivo de estas características es un tubo cilíndrico en el que se introduce el falo y del que, bien de una forma manual, bien de un modo automático, se extrae el aire.

¿Qué se consigue con eso? Hacer que la sangre, por el efecto de succión y vacío, afluya al miembro y éste consiga una erección.

Este aparato es muy utilizado por aquellas personas que padecen de disfunción eréctil. Con ella, y con la ayuda de un anillo para el pene, que debe servir para retener la sangre dentro de él, la persona que tiene problemas de erección puede conseguir una erección más firme y duradera.

La bomba de vacío está especialmente recomendada en aquellos casos en los que la disfunción eréctil es debida a problemas médicos como pueden ser la diabetes, la hipertensión, la insuficiencia renal u otras enfermedades cardiovasculares.

El abuso del tabaco, el acohol o las drogas puede causar también problemas de erección. En estos casos también puede resultar útil este dispositivo.

Para utilizar una bomba de vacío deben seguirse los siguientes pasos:

  1. Introducir el miembro en el cilindro.
  2. Se activará la bomba si ésta lleva motor o, bien, se manipulará el émbolo de la misma para crear el vacío.
  3. Una vez el falo esté erecto, se colocará en la base del mismo un anillo de constricción.
  4. Se retira la bomba de vacio.

Una vez conseguida y mantenida la erección se recomienda no tener el anillo constrictor puesto más allá de media hora.

La bomba de vacío debe utilizarse con cuidado, pues puede provocar los siguientes efectos secundarios:

  • Dolor o molestia.
  • Entumecimiento.
  • Enrojecimiento.
  • Pequeños hematomas.
  • Heridas en la piel por el uso inadecuado del anillo o de la goma constrictora.